Mejores Técnicas de Oratoria para Ser un Orador Poderoso

Grandes oradores como Sócrates, Winston Churchill, Jawaharlal Nehru, Abraham Lincoln y Martin Luther King dieron discursos que dejaron al público encantado y verdaderamente exaltado. Parecían tener el talento como un regalo innato, que no podía ser replicado por nadie en todo el mundo. Había ciertas características peculiares que todos estos grandes oradores tenían en común. La forma en que se relacionaban con la audiencia, las palabras que eligieron, sus convicciones y muchas otras cosas que hicieron que sus discursos vivieran para siempre. Por lo tanto, si te estás preparando para un próximo discurso y quieres crear magia con él, he aquí una lista de los mejores consejos de oratoria a tener en cuenta para convertirte en un orador poderoso.

1. Ser Feliz y Humorístico

Retrocede y piensa en el lado divertido de tu discurso o presentación. Tomar todo en serio es fatal. El público debe sentirse bien en tu presencia. La mejor manera de mantenerlos comprometidos y atentos es insertar algún humor calculado en la presentación. Una broma, ser satírico, y nunca tímido de depreciarse. Crear una conexión y vínculo con ellos. La vida de todos en general está sangrando. ¿Por qué no tomar algunos de los momentos agrios y reemplazarlos con dulces? Esto te ayudará a ser un orador poderoso. Vea los artículos  «Cómo superar el miedo a hablar en público» y  «Cómo Usar las Pausas al Hablar en Público«

2. Un Orador Poderoso es Interesante

Los niños se duermen durante la conferencia, y los adultos no son menos. Los discursos, por lo tanto, no deben permanecer en la bahía de la monotonía y la fricción. Ser interesante es la clave de un orador poderoso. Puedes hacerlo combinando palabras con algunas imágenes y audio. Da a las personas imágenes y diagramas para recordar. Incluso aquellos de ustedes que no son demasiado buenos con las palabras pueden mantener esto como un secreto bajo la cubierta de la tecnología.

3. Tener Buena Presencia

Tener la presencia escénica adecuada no significa que todos los hombres tienen que verse guapos, o todas las mujeres tienen que verse bonitas y crédulas. Hay dos aspectos de la presencia escénica de un orador poderoso: el exterior y el interior. Vea los artículos «Las 5 técnicas clave del lenguaje corporal para hablar en público» y «Uso de los Ademanes y Gestos en la oratoria»

Desde el exterior, asegúrate de vestir bien, no repulsivo o desaliñado. Mantente limpio y ordenado. Lava tu ropa bien, pule tus zapatos, y mantén tu cabello ordenado. En el interior, prepárate para el evento también. Cepilla todos los conceptos, siéntete feliz y no dejes que nada negativo afecte tu rendimiento. Esto es esencial para ser un orador poderoso. 

4. No Siempre se Trata de Gramática Correcta

Es importante hablar de la manera que lo harías en una conversación, asumiendo que la gramática no es el final de ella. Pero para un orador poderoso, hacer que su audiencia entienda su punto es más importante que ser gramaticalmente correcto. Quizás puedas usar una jerga más adecuada a tu público para hacerlo entender mejor (pero recuerda que no debes exagerar al descuidar la gramática, pues esto puede restarle peso a tu presentación).

Además, no va a haber mucha gente prestando atención a eso. Reemplaza todo lo demás con confianza. Estar en posición vertical, hablar con tu corazón, ser fresco y ser natural.

Vea el artículo «La Modulación de la Voz: Una Técnica Clave en la Oratoria«

5. Estar Convencido de lo que se Dice

Ser apasionado y estar convencido de lo que se dice es muy importante para ser un orador poderoso. Si estás dudoso de lo que dices o no tienes la suficiente seguridad y confianza al hablar, tu audiencia lo notará de inmediato. Si se trata de una cuestión social, ya sea una presentación de la empresa, se trata de convencer a un montón de personas acerca de tus creencias y convicciones. Prepárate por adelantado. Siempre hazte preguntas básicas como: ¿Cuál es el uso subyacente de tu discurso? ¿Qué es bueno para ti y la audiencia? ¿Estoy convencido de lo que voy a hablar o no?

6. Ser Expansivo, Inspirador y Edificante

Si tomas nota de algunos de los mejores discursos de la historia, notarás que los oradores influyentes siempre dan voz a lo que las masas solo han conocido subconscientemente. A la audiencia le encanta oír las palabras que no llegarían a ellos. Buscan la seguridad, una expansión y alguna forma de inspiración que despierta una mayoría para creer las palabras del hablante. Cuanto mejor puedas hacer esto, más éxito tendrás como orador poderoso. Vea el artículo «La Importancia de la Voz en la Oratoria»

7. Dar al Público Algo Fuera de la Caja

La audiencia inteligente de hoy sabe de antemano acerca de los contenidos principales de un discurso, o la información que se entrega en un evento en particular. Con la ayuda de Internet pueden recopilar información amplia por su cuenta. Por lo tanto, como orador puedes hacer dos cosas:

Uno, darles algo totalmente nuevo, algo que no van a hallar en ninguna parte.

En segundo lugar, organizar tu presentación o discurso de una manera que en el menor lapso de tiempo, la información quede detallada, que es a la vez fuera de la caja e inspiradora. Esto te ayudará a destacarte como un orador poderoso.

8. Mantenerlo Simple y Casual

Los tiempos de conferencias formales son cosa del pasado. Ser informal facilita a las multitudes entender y les permite respirar incluso cuando el tema del discurso es pesado. No uses un lenguaje difícil de entender. Trata siempre de hacer un mejor uso del área, moverte; hablar con la audiencia directamente, estar relajado todo el tiempo, no hay presión. Manténlo simple y casual para ser un orador poderoso. Vea el artículo «Técnicas de la oratoria: La Improvisación.»

9. Contar Historias

En cuestión de unos minutos, el público debe estar convencido de tus ideas. Para lograr esto, usa una de las antiguas técnicas de oratoria: contar historias. Hechos e historias interesantes de la vida real o de la ficción; la raza humana siempre está más inspirada en contextos emocionales que provienen de la narración de la historia. La capacidad de los cerebros de retener historias es mucho mejor que la de recordar cualquier cifra numérica. Contar historias efectivamente te ayudará a ser un orador poderoso.